Las fiestas decembrinas ya están a la vuelta de la esquina, y eso solo puede significar una cosa: es hora de presupuestar.
Por supuesto, siempre va a haber una diferencia entre lo que queremos hacer y lo que deberíamos hacer. Entre Acción de Gracias y Año Nuevo, los gastos de los consumidores llegarán a niveles estratosféricos.
Y para muchos estadounidenses, un mes de más gastos que los usuales puede causarles dificultades a través de los años.
Por eso presupuestar es tan importante, especialmente durante las semanas antes de las fiestas.
Para maximizar tus ahorros, es necesario que tenas una estrategia. Y para crear una buena estrategia, necesitas entender las diferencias entre gastos fijos y gastos variables.
En este pequeño artículo, te explicaremos estas dos categorías de gastos, te daremos ejemplos para ambas y te enseñaremos el secreto para proteger tus finanzas durante las fiestas.
¡Empecemos!
¿Qué Son Los Gastos Fijos?
Los gastos fijos son los gastos más consistentes dentro de tu presupuesto.
Son los que tienes que hacer mensualmente u dentro de otra periodicidad: semanalmente, trimestralmente, cada dos años o anualmente. Frecuentemente se les dice “gastos fijos periódicos.”
Aunque no hagas pagos cada mes, todavía puedes calcular el costo promedio mensual de un gasto. Por ejemplo, digamos que pagas $180 por una póliza de un seguro de vida cada trimestre (o $720 anualmente). Para calcular el costo promedio mensual, simplemente divide el pago entre tres. En este caso, tu costo promedio mensual sería de $60.
Nota: Cuando se trata de presupuestar, muchas veces se pasan por alto los cargos trimestrales o los de cada dos años. Asegúrate de tomar en cuenta cada cargo recurrente para que sepas exactamente cuánto estás gastando.
Ejemplos de Gastos Fijos
Los gastos fijos vienen en muchas formas y tamaños, incluyendo:
- Rentas o pagos de una hipoteca
- Pagos de servicios (incluyendo tu teléfono, internet y cable)
- Pagos de auto
- Deudas estudiantiles
- Deudas personales
- Primas de seguros
- Gastos en cuidado infantil
- Servicios de suscripción
- Servicios de streaming
- Membresías del gimnasio
- Colegiaturas
Recuerda: cualquier pago que hagas mensualmente o de forma recurrente es un gasto fijo.
¿Qué Son Los Gastos Variables?
Los gastos variables son menos predecibles que su contraparte fija.
Aunque es verdad que los gastos variables pueden ocurrir de manera regular, estos son influenciados en su mayor parte por tus decisiones diarias (y semanales).
Gracias a que son impredecibles, los gastos variables pueden hacer que sea más difícil presupuestar.
En muchos casos, los gastos variables constituyen “compras impulsivas”, como ir por una malteada o despilfarrar en unos tickets para un concierto. Y durante las fiestas, 1 de cada 3 compras son impulsivas.
En algunos casos, los gastos variables pueden derivarse de tus gastos fijos.
Por ejemplo, un consumidor podría decidir comprar una película a $20 en su plataforma favorita (Amazon Prime, por ejemplo), lo que duplicaría el costo mensual de la suscripción con solo presionar un botón.
Finalmente, los gastos variables pueden venir en la forma de emergencias, como el pago de una cuenta médica.
Aunque los gastos variables son inevitables, estos se pueden controlar y moderar con la suficiente planeación y paciencia.
Ejemplos de Gastos Variables
Los gastos variables abarcan muchos rubros e incluyen:
- Gastos de la despensa
- Salidas a comer (o pedidos de comida)
- Compras en entretenimiento
- Ropa
- Artículos de cuidado personal
- Cuentas médicas de emergencia
- Reparaciones y mantenimiento del hogar
- Reparaciones y mantenimiento de un coche
- Gasolina
Cómo Ahorrar Dinero Durante Las Fiestas
Antes de que Santa baje por la chimenea, es hora de contestar la pregunta más importante: ¿los gastos durante las fiestas se consideran fijos o variables?
Veamos: ¿tickets de avión, pays de calabaza, lattes de menta, árboles navideños, platos de comida para fiestas, regalos nuevos, botellas de champaña, y más…?
Así es, no hay duda de que las fiestas representan una temporada de gastos variables.
De hecho, el hogar promedio gastará alrededor de $1,500 solo en compras decembrinas antes del primer día del 2023. Si extendemos ese costo a un año completo, esto representa $125 extras al mes.
He aquí el truco: si puedes presupuestar para las fiestas como si fueran gastos fijos, tus finanzas estarán mucho mejor.
En otras palabras, crea un presupuesto con tiempo, decide exactamente cuánto vas a gastar (en viajes, comida, regalos, etc.), y comprométete a mantenerte dentro del límite.
Para ayudarte con tu misión, te recomendamos que consideres utilizar la estrategia del “sobre presupuestal.” Se trata de dividir tus ingresos en varias categorías esenciales, como tu renta, tus gastos en despensa, tu gasolina, y sí, tus gastos decembrinos.
Ya que hayas hecho esto, escribe cada categoría en un sobre físico y coloca la cantidad en efectivo que corresponda en cada sobre.
Una vez que hayas gastado todo el dinero sabrás que has llegado a tu límite. Y si te queda un poco de dinero en una categoría, tendrás la opción de usarlo en otra.
Nota: si usar sobres físicos y efectivo te parece cansado, puedes seguir el mismo proceso con Goodbudget en tu smartphone o tableta.
Pasar Diciembre y Más Allá
Las fiestas realmente son de los momentos más maravillosos del año.
En medio de la emoción, te recomendamos que diseñes un plan de gastos para que puedas disfrutar de la temporada sin quedarte sin dinero.
Toma un tiempo para revisar tus gastos fijos y tus gastos variables. Después crea un presupuesto que te parezca razonable y apégate a él lo mejor que puedas.
Al final del día, tendrás más confianza en tus finanzas y más flexibilidad para proteger a tus seres queridos en casa.
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